La contaminación del aire, el calor extremo y las duras condiciones de trabajo que muchos de nosotros enfrentamos están dejando huellas graves en nuestra salud. Nuestros niños, en particular, están sufriendo las consecuencias: tienen tasas alarmantemente altas de asma y enfermedades respiratorias debido a la exposición constante a la contaminación, impulsada por el uso de combustibles fósiles y el cambio climático. A medida que las temperaturas siguen aumentando y los desastres naturales se intensifican, la protección de nuestra comunidad no puede esperar más. Es hora de tomar acción y exigir soluciones que protejan a nuestros seres queridos y a las generaciones futuras.
¿Cómo afecta nuestra salud respiratoria la exposición prolongada a la contaminación del aire ?
La contaminación del aire es un factor que ha deteriorado la calidad de vida de muchas comunidades, especialmente las latinas. Según el National Heart, Lung and Blood Institute, los niños latinos tienen un 40% más de probabilidades de morir a causa del asma en comparación con otros niños. Este alarmante dato está relacionado, en gran parte, con la exposición desproporcionada a la contaminación causada por combustibles fósiles. Vivir cerca de carreteras muy transitadas o zonas industriales aumenta significativamente el riesgo de desarrollar enfermedades respiratorias como el asma y afecciones pulmonares crónicas.
Además, según el Center for Health Journalism, los trabajadores agrícolas, enfrentan condiciones laborales extremas que, sumadas a la exposición continua a pesticidas, representan una amenaza constante para su salud. Estos pesticidas no solo afectan a los trabajadores directamente en los campos, sino que también pueden llegar a sus hogares a través de la ropa y herramientas de trabajo, exponiendo a sus familias a los mismos riesgos. La exposición prolongada a estos químicos puede provocar graves problemas respiratorios, enfermedades cardiovasculares e incluso enfermedades crónicas como el cáncer.
Aunque existen regulaciones para proteger a los trabajadores, la realidad es que estas medidas son insuficientes para mitigar los riesgos a los que están expuestos diariamente. Las comunidades latinas, tanto en zonas urbanas como rurales, continúan luchando contra los efectos de la contaminación, una batalla que sigue poniendo en riesgo la salud de nuestros seres queridos.
¿Por qué el riesgo de desarrollar asma es mayor en nuestra comunidad?
El riesgo elevado de asma en nuestra comunidad no es casualidad. Factores como la falta de acceso a atención médica y la exposición a contaminantes nos afectan desproporcionadamente:
- El acceso limitado a la atención médica: Dificulta que nuestra comunidad maneje el asma adecuadamente, elevando el riesgo de complicaciones al no recibir diagnósticos ni tratamientos oportunos. Tener proveedores que comprendan nuestro idioma y cultura mejora la atención, pero sigue siendo un desafío.
- Contaminación del aire: Muchas familias latinas viven en áreas urbanas con altos niveles de contaminación, lo que incrementa significativamente el riesgo de asma, sobre todo en los niños, quienes son más vulnerables.
- Irritantes laborales: Trabajar en sectores como la construcción y la agricultura expone a nuestra comunidad a polvos y químicos que aumentan considerablemente el riesgo de desarrollar asma.
- Historia familiar: Tener un padre con asma incrementa la probabilidad de que los hijos también desarrollen esta enfermedad, lo que hace del asma un problema común entre generaciones.
¿De qué manera el cambio climático ha agravado las enfermedades respiratorias de nuestra comunidad que viven en áreas urbanas?
El cambio climático ha empeorado la calidad del aire en zonas urbanas donde vive nuestra comunidad. Los incendios forestales generan partículas finas que agravan el asma, especialmente en niños latinos, quienes son más vulnerables. Además, el aumento de temperaturas intensifica la formación de ozono, un contaminante que empeora las enfermedades respiratorias.
¿Cómo impacta el calor extremo la salud de nuestra comunidad?
El cambio climático también ha aumentado la frecuencia e intensidad de las olas de calor, impactando gravemente la salud de nuestras familias, especialmente en estados como Arizona y Nevada. El calor extremo tiene efectos directos sobre la salud, afectando principalmente a quienes viven en áreas vulnerables y a aquellos que trabajan al aire libre, como los trabajadores agrícolas. Un estudio reciente reveló que el 77% de los votantes latinos consideran que los eventos climáticos extremos, como las olas de calor, están deteriorando su bienestar general, exacerbando enfermedades respiratorias y cardiovasculares. Además, el 74% de los latinos afirma que el calor extremo limita su capacidad de disfrutar de actividades al aire libre, lo que influye negativamente en su calidad de vida y bienestar físico.
¿Dónde podemos encontrar recursos y asistencia en los Estados Unidos para quienes están afectados?
Si tú o tu familia están enfrentando problemas de salud debido a la contaminación o el cambio climático, hay organizaciones y recursos que pueden ayudarte:
- Red de Defensores de la Salud Pública y el Medio Ambiente (PSR): Ofrece apoyo y promueve políticas de energía limpia para mejorar la salud pública.
- American Lung Association: Proporciona información sobre cómo protegerse de la contaminación del aire y ayuda a personas con enfermedades respiratorias.
- Coalición de Justicia Ambiental (Environmental Justice Coalition): Ayuda a las comunidades de bajos ingresos afectadas por la contaminación y el cambio climático.
- National Hispanic Medical Association (NHMA): Promueve la salud en las comunidades latinas mediante programas de concientización y acceso a recursos médicos.
- Health Resources and Services Administration (HRSA): Ofrece atención médica accesible a través de clínicas comunitarias.
- California Rural Legal Assistance (CRLA): Brinda servicios legales y de defensa a trabajadores agrícolas latinos en temas de salud y trabajo.
¿Qué consejo práctico puedo aplicar para proteger la salud de mi familia?
- Evitar la exposición a la contaminación: Limita el tiempo al aire libre en días de alta contaminación y utiliza purificadores de aire en casa.
- Mantenerse hidratado: Asegúrate de beber suficiente agua, especialmente en climas cálidos, para prevenir problemas de salud relacionados con el calor.
- Fomentar el transporte sostenible: Usa la bicicleta, camina o utiliza el transporte público siempre que sea posible para reducir la contaminación del aire.
- Apoyar iniciativas de energía limpia: Participa en movimientos locales que promuevan la transición hacia fuentes de energía limpias y sostenibles.
- Mantenerse informado: Revisa regularmente las alertas sobre la calidad del aire y el clima extremo a través de aplicaciones y sitios web confiables.
- Acceder a servicios de salud: Busca y utiliza recursos y organizaciones que ofrezcan atención médica asequible para enfermedades respiratorias y otras necesidades de salud.
- Educación comunitaria: Comparte información sobre los efectos de la contaminación y el cambio climático en la salud con amigos y familiares.
- Promover espacios verdes: Participa en iniciativas para crear y mantener espacios verdes en tu comunidad, lo cual ayuda a mejorar la calidad del aire.
Es fundamental que tomemos medidas para proteger a nuestra comunidad. La transición hacia soluciones de energía limpia no solo mejorará la calidad del aire que respiramos, sino que también reducirá el riesgo de asma y otras enfermedades respiratorias que afectan a nuestras familias. Además, según una reciente encuesta de Climate Power, el 65% de los votantes latinos están motivados para elegir a un presidente que tome en serio el cambio climático y el clima extremo, y que responsabilice a los grandes contaminadores del petróleo.
La salud de nuestra comunidad depende de nuestro compromiso colectivo para abordar estos problemas y buscar un futuro más saludable y sostenible.
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